domingo, 28 de junio de 2020

Podcast 1: Agilidad en la Práctica: Hacer Agile


Estoy experimentando con los Podcast. Abrí en la plataforma Ivoox un canal de Conversaciones Agiles. Dejo en esta publicación el enlace al podcast 1:

Agilidad en la Práctica: Hacer Agile

Gracias por escucharme y dejarme tu feedback en los comentarios.



sábado, 27 de junio de 2020

Equilibrar el Ritmo


Tendemos, en ocasiones, a ser radicales, enfatizando, por ejemplo, el machismo o el feminismo, el capitalismo o el socialismo, lo luminoso o lo oscuro, la lentitud o la rapidez.

Yin-Yang es una filosofía que busca unificar en armonía 2 fuerzas opuestas para favorecer el movimiento y el cambio. Se trata de conseguir el tan ansiado Equilibrio, y en esta ocasión, comparto ideas sobre Equilibrar el Ritmo.

Muchos sentimos que el tiempo ha pasado y pasa muy rápido. Los años, meses y días pasan sin parar, sin darnos cuenta, lo que puede significar que vivimos en un ritmo acelerado, haciendo muchas cosas a la vez, exigiendo demasiado de nosotros mismos, así como de los demás.

Al vivir acelerados, pasamos mucho tiempo en automático, perdemos conciencia de nuestras tareas y pequeños logros, nos cansamos y equivocamos más, cayendo en retrabajo y pérdidas de tiempo. Trabajamos con más tensión y estrés, lo que nos hace más impacientes e irritables.


Nos acostumbramos a vivir en base a objetivos y metas materiales, laborales y de aprendizaje, buscando tener, ganar y saber más, con la intención de con ello sentirse realizado, exitoso y reconocido.

El mindfulness, es un movimiento que propone vivir con atención plena todo lo que hacemos, lo que nos lleva a hacer una cosa a la vez, evitando distracciones y bajando la velocidad.

Al permanecer en el momento presente, te focalizas en lo que haces y sucede a tu alrededor, evitando el desequilibrio que se produce cuando tu mente te empuja al futuro, a lo próximo que debes hacer, acelerando el ritmo.

Vivir acelerado también te desconecta de tu ser. Cuando bajamos el ritmo se abren espacios para la reflexión y conexión interna que nos facilita trabajar nuestros vacíos y necesidades. A menos, que la razón por la que vives tan acelerado, es para evadir problemas internos, que te aseguro no van a desaparecer solos.

Aprender a vivir en otro ritmo, no significa que dejes de lado tus deberes, aunque sI, saber hasta donde puedes comprometerte.

Poner atención plena es amar lo que hacemos y con quien interactuamos, donde ponemos nuestra atención esta nuestra mente y corazón.

Hacer las cosas con amor, sin quejas ni lamentaciones, no importa que no sea ideal, estas trabajando para ser cada vez más feliz.

Equilibra tu ritmo.

Soy un ser completo. Desapego


Soy un ser completo que no depende de algo externo para ser feliz.

Agradezco y bendigo mi casa, mi trabajo, a mi pareja, a mis hijas, a mi familia y amigos.

Permito que los demás sean como son, respeto su forma de ser, decisiones y acciones. Procuro no cuestionar, ni controlar y mantenerme sin expectativas.

Nada ni nadie tiene la culpa de mis problemas, soy responsable de mi cuerpo, de mis emociones y sentimientos. Y esa auto-responsabilidad me hace libre y con el poder de decidir, hacer y resolver.

No es fácil, aceptar, agradecer lo que fue y dejar ir. Un buen pasado se extraña, se añora, no podemos volver a tener 20 o 30 años, tener de nuevo a tus padres y hermanas como años atrás, o vivir con tus hijas y compartir penas y alegrías.



El momento presente es otro, y nos corresponde apreciar lo que este nos trae, aprovechar sus oportunidades y trabajar motivos de felicidad ajustados a los nuevos tiempos.

Es todo un proceso, no se puede decretar y que sea así de la noche a la mañana, se vive, transforma y evoluciona día a día.

Yo Soy un Ser completo.

sábado, 13 de junio de 2020

Scrum y Kanban juntos en Agile: Scrumban

Scrum y Kanban son dos de los marcos de trabajo más utilizados en Agile. Ambos métodos incorporan los principios y valores del agilismo, facilitando la transparencia, inspección, adaptación y mejora continua del trabajo del equipo. Asimismo, promueven el desarrollo de equipos auto-organizados orientados a dar valor al negocio.

En general, decimos que Scrum es más adecuado para productos y proyectos de desarrollo donde el trabajo del equipo puede ser planificado Sprint tras Sprint, partiendo de un backlog priorizado de requisitos, haciendo entregas frecuentes de valor e implementando acciones de mejora que fortalezcan el desempeño del equipo.

Se recomienda usar Kanban en equipos que tienen un flujo continuo de solicitudes de trabajo, donde la planificación por Sprints puede no ser viable, ya que el equipo atiende muchas peticiones que varían en prioridad y alcance, junto con acciones de mejora continua que fortalezcan la calidad del software y la eficiencia del flujo.

Cuando el equipo de desarrollo tiene trabajo planificado (proyectos, evolutivos y mejoras) y no planificado (mantenimiento, incidencias y soporte), y se quiere beneficiar de Scrum y de Kanban, puede implementar una combinación de prácticas conocidas como Scrumban.

El inconveniente de Scrumban, y por lo que existen reservas en algunos agilistas, es que no cuenta con mejores prácticas claramente definidas, por lo que los equipos que lo implementan experimentan con distintas opciones, que hacen decidir entre:
  1. Un backlog con tareas planificadas y otro con no-planificadas, o un único backlog.
  2. Un tablero Scrum y otro Kanban, o todo en un único tablero.
  3. El equipo atiende todo tipo de tareas, o parte del equipo atiende, o se rota, el no-planificado.
  4. Se estiman o no se estiman las tareas no planificadas. Se estiman o no los bugs.
  5. Capacidad del equipo en puntos de historia para el trabajo planificado y en horas de trabajo para el no-planificado, o todo el trabajo se estima y se registra con la misma unidad.
¿Te suena familiar? En todo caso, comencemos por tener claro los objetivos de la implantación agile en el equipo, y ello llevará a implementar prácticas con métricas y acciones de mejora adecuadas. Algunos objetivos pueden ser:
  1. Incrementar la capacidad de entrega de nuevas funcionalidades. Reducir el trabajo no-planificado.
  2. Incrementar la calidad del software. Reducir el número de Bugs.
  3. Mejorar la predictibilidad. Cumplir el compromiso de cada Sprint.
  4. Mejorar la eficiencia del flujo de trabajo. Reducir los tiempos de desarrollo, retrabajos, bloqueos y desperdicios.
  5. Mejorar la priorización y entrega de valor. Gestionar la deuda técnica.
  6. Disponer de métricas realistas que apoyen los procesos de análisis y toma de decisiones. Tener evidencias del impacto de las acciones de mejora en los procesos.
Algunas prácticas pueden servir a varios equipos, y otras depender de condiciones propias. Siendo agile un modelo empírico, donde las decisiones se basan en lo que se experimenta y evidencia, se promueve la experimentación, inspección y adaptación.

Comparte tus opiniones y experiencias con Scrumban (^.^).

viernes, 12 de junio de 2020

Ser Productivo en Remoto: Agile SmartWorking


Teletrabajo o trabajo en remoto, en pocas palabras, se refiere a trabajar en un lugar diferente a la oficina haciendo uso de las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC).
Un nuevo término comienza a tomar fuerza en este ámbito: el SmartWork o Trabajo inteligente, donde tienen cabida las nuevas TIC que han surgido producto de las necesidades emergentes de comunicación y colaboración, en forma masiva y digital. A esto le podemos añadir prácticas del mindset agile y tenemos Agile SmartWork.
Por otra parte, en épocas del Covic-19, el lugar de trabajo suele coincidir con nuestro hogar, espacio que la mayoría comparte con su familia. Algunas personas, presentan dificultades personales y familiares producto de la pandemia, del confinamiento, del temor al contagio, sobre cómo gestionar la incertidumbre y la crisis en general. También, se presentan oportunidades, abriendo espacios y tiempo para la reflexión, el autoconocimiento, el aprendizaje, el fortalecimiento de valores, entre otros.
A esto podemos agregar, que muchos de nosotros hemos añadido horas a la jornada laboral, reportando tener días muy ocupados y ajetreados, no necesariamente más productivos.
Ser productivos implica realizar tareas prioritarias para lograr objetivos y metas de valor, de forma eficiente, haciendo un uso óptimo de recursos, de tu energía y de tu tiempo.

Ser productivos exige tener claros los propósitos, objetivos y metas, así como los valores y principios, tanto laborales como personales, a fin de poder identificar qué tareas son importantes, prioritarias, las que dan más valor a tu vida y a tu trabajo.
En este sentido, maximizar el hacer menos, te dará más tiempo para lo importante.
Esto va de Priorizar, que nuestras listas de tareas estén encabezadas por aquellas cosas que dan mayor valor, y que permiten lograr o avanzar objetivos y metas.
Otra máxima de la productividad es la de realizar una tarea a la vez, no juegues al multitasking, créeme no funciona. Toma una tarea de tu lista, la más prioritaria, y enfócate en ella hasta terminarla, mejor si la puedes hacer de forma continua, sin interrupciones. Solo al terminarla o bloquearse, tomas la siguiente. Enfócate en terminar tareas, no en iniciarlas.
Puedes tener objetivos a corto, mediano y largo plazo, pero en contextos cambiantes y con mucha incertidumbre, no tiene sentido realizar ejercicios exhaustivos de planificación, sino hacer planes a corto plazo (2 semanas), flexibles y adaptativos, que se ajusten a las realidades del momento en que se ejecutan, tomando en cuenta factores como si las tareas priorizadas están listas para ser realizadas, si se tiene la capacidad para acometerlas en esas 2 semanas, reflexionando que mejoras incorporar para reducir las interrupciones y los desperdicios que afectan, o pueden afectar nuestra productividad y la de nuestros equipos de trabajo.
El espacio de trabajo en casa, puede ser la diferencia entre resultados productivos o no. Si trabajas con un portátil, piensa en lo beneficios de tener un monitor, una cámara web o unos auriculares con micrófono, también el disponer de un escritorio o mesa a una altura adecuada y una silla ergonómica donde puedas estar varías horas sentado/a. Disponer de los elementos adecuados permitirá mejorar tu salud, tu postura, y tener mejores videoconferencias.
Y esto nos lleva a la tecnología, y la conveniencia de utilizar aplicaciones multidispositivo que funcionen en smartphones, tablets, portátiles y ordenadores de escritorio, que nos den la libertad de usar el dispositivo que más nos convenga. Las suites de aplicaciones de Microsoft Office 365 y de Google, ofrecen una amplia gama de aplicaciones en la nube. Cobran especial relevancia las aplicaciones de video llamadas en grupo como Teams, Zoom o Hangouts, así como los chats de mensajería instantánea como whatsapp o slack, que facilitan la comunicación y la colaboración constante entre los miembros del equipo, y con nuestros familiares y amigos.
Otras herramientas relevantes para impulsar nuestra productividad son los tableros colaborativos, para organizar e ir moviendo nuestras tareas por diferentes estados, como lo es Trello, y más profesionalmente Jira, para organizar listas de chequeo, recordatorios y notas Google Keep, para facilitar dinámicas con tableros Mural y Miro, y para hacer retrospectivas FunRetro.
Por último, ser productivo también depende de nuestra motivación, del dominio que tenemos sobre la tarea, de la autonomía con que podemos desenvolvernos, del ambiente de trabajo, de la calidad de las relaciones, de los incentivos y recompensas, entre otros aspectos que valoramos.
¿Pudiste identificar en la lectura valores y prácticas agile?... Seguro que Si!!!

viernes, 5 de junio de 2020

El Orden importa: Primero lo prioritario


Se trata de poner el foco en lo que verdadera-mente da VALOR a tu vida, en aquellas tareas que al hacerlas cumples tus propósitos y objetivos.

Vamos a inspirarnos en especialistas y técnicas de productividad:

1. Covey nos dice: Primero lo Primero, para que implementes un sistema coherente de prioridades basadas en lo importante.

2.- Gary Keller, centra su libro lo Único, en que des respuesta a la pregunta: ¿Qué es lo ÚNICO que podrías hacer ahora que haría que todo lo demás fuera más fácil o innecesario?

3.- Steve Jobs, señala que, al resolver problemas, las primeras soluciones suelen ser muy complejas, pero si vives con el problema y pelas más capas de la cebolla, llegas a soluciones más elegantes y simples. Asimismo, puedes preguntarte: ¿Cuál es la tarea del centro de la cebolla, que al resolverla desaparecerán problemas y otras consecuencias, es decir, las capas?

4.- La técnica de los “5 porque” consecutivos ayuda a llegar a la causa raíz, al centro de la cebolla. Un ejemplo: No tengo tiempo, pq tengo que hacer muchas cosas, pq todos me piden que los ayude, pq además de mis tareas hago las de otras personas, pq no se decir que no. Resuelve esta última y resolverás el resto.

5.- Ley de Pareto: el 20% de lo que hacemos provoca el 80% de resultados. Identificar ese 20% evitará mucho desperdicio de tiempo.

6.- Técnica MoSCoW: Primero las tareas que deben hacerse obligatoriamente (Must), en segundo lugar, tareas importantes, pero no obligatorias (Should), siguen las que podrías hacer si tienes tiempo (Could), y por último las que no tienes que hacer en este momento (Won’t).

7.- Haz solo una cosa a la vez. Olvida la multi-tarea, genera desperdicio de tiempo el moverte entre una cosa y la otra.

8.- El Costo de la Demora: Haz aquello cuyo costo se incrementa en la medida que pasa el tiempo.

9.- Establece criterios de priorización en base a tus objetivos y recursos, valora las tareas y ordena.
Maximizar el hacer menos, te dará más tiempo para lo importante.


En Instagram @Soy.Agile.Coach

miércoles, 3 de junio de 2020

Lograr ser productivos en tiempo de crisis, tiene sus desafíos, pero no por ello renunciamos a ello.

Ser productivo significa obtener los mejores resultados haciendo el mejor uso de los recursos y del tiempo, no se trata de tener días ocupados y ajetreados, se trata de hacer tareas importantes para lograr objetivos y metas, de forma eficiente.

Ser eficiente tiene que ver con el uso óptimo de tus recursos, de tu energía y de tu tiempo.

El tiempo es una constante que no podemos controlar, se mueve sin prisa y sin pausa, al mismo ritmo para todos. 

Tampoco lo podemos retroceder, ni acelerar, ni hacer más lento, ahorrar o comprar. 

Lo que si podemos gestionar son nuestras acciones y decisiones, para intencionalmente ser más productivos y hacer un uso eficiente del tiempo.

Queremos ser productivos en aquello que es importante y le da mayor valor a nuestra vida. 

Tener claro tu propósito, objetivos y metas personales y laborales, así como tus valores y principios, te permite identificar lo qué es importante, prioritario, lo que le da más valor a tu vida y a tu trabajo.

Puedes tener objetivos a corto, mediano y largo plazo, pero en contextos cambiantes y con mucha incertidumbre, no tiene sentido realizar ejercicios exhaustivos de planificación. 

Realiza planes flexibles y adaptativos, que se ajusten a las realidades del momento en que se ejecutan.